La advocación de Nuestra Señora la Divina Pastora de las Almas es una manifestación mariana que tiene sus raíces en el siglo XVIII en el convento capuchino de las Santas Justa y Rufina en Sevilla, España. Esta devoción es significativa tanto desde una perspectiva teológica como histórica, ya que destaca la maternidad divina de la Santísima Virgen María y su papel como guía espiritual hacia su Hijo Jesús. Aquí se presenta un resumen fundamentado y argumentado con rigor teológico:
Historia de la Devoción:
La historia de Nuestra Señora la Divina Pastora de las Almas comienza en 1703 cuando el Padre Isidoro de Sevilla, un capuchino, tuvo una experiencia espiritual en la que contempló a la Virgen María bajo la advocación de Divina Pastora. La Virgen se le apareció como una hermosa pastora, sosteniendo un cayado en su mano derecha y un cordero en la izquierda. Esta visión inspiró al Padre Isidoro a propagar la devoción a la Divina Pastora.
El pintor Alonso Miguel de Tovar fue encargado de crear una imagen de la Divina Pastora basada en la descripción del Padre Isidoro. Esta imagen fue trajeada por monjas del Convento de la Encarnación y posteriormente esculpida por Francisco Antonio Gijón a tamaño natural. La imagen de la Divina Pastora se llevó en procesión por primera vez en 1705, marcando el inicio de la devoción.
Descripción de la Imagen:
La imagen de la Divina Pastora se caracteriza por representar a la Virgen María como una hermosa pastora celestial. En su mano derecha sostiene un cayado y en la izquierda un cordero. Este simbolismo es profundo en su significado: el cayado representa su guía y liderazgo, mientras que el cordero simboliza a Jesús como el Cordero de Dios. Además, la imagen lleva un traje de Pastora, que evoca la sencillez y la cercanía con el pueblo.
La Maternidad Divina de la Santísima Virgen:
La Divina Pastora es una manifestación de la Virgen María como madre espiritual de todos los fieles. Su imagen como pastora simboliza su papel de guía y protectora de las almas, llevando a los creyentes hacia su Hijo, Jesús.
Esta advocación resalta la maternidad espiritual de María, que se extiende a toda la humanidad. María es vista como la madre que cuida y vela por el bienestar espiritual de sus hijos, guiándolos en el camino de la fe.Devoción y Propagación:
La devoción a la Divina Pastora se arraigó en Sevilla y luego se extendió a Hispanoamérica, donde se convirtió en patrona de las Misiones Capuchinas.
En Venezuela, la imagen de la Divina Pastora llegó por error a la Iglesia de Santa Rosa en 1736 y se convirtió en objeto de gran devoción. La imagen ha sido testigo de milagros y ha protegido a la población en momentos de adversidad, como durante una epidemia de cólera y un terremoto.La devoción a la Divina Pastora se extendió a Venezuela cuando, por error, la imagen destinada a la Iglesia de la Concepción en Barquisimeto fue enviada a Santa Rosa. Los intentos de mover el cajón que contenía la imagen resultaron infructuosos, lo que llevó a la creencia de que la Santísima Virgen deseaba quedarse en Santa Rosa. Desde entonces, la Divina Pastora se ha convertido en la Patrona del estado Lara en Venezuela.
Milagros y Devoción Popular:
La imagen de la Divina Pastora ha estado asociada a varios milagros a lo largo de los años. Se relata un milagro durante un terremoto en 1812, cuando la iglesia de Santa Rosa se derrumbó, pero la imagen permaneció intacta. También se destaca el episodio del Padre Yépez, quien se ofreció a la Virgen como víctima para poner fin a una epidemia de cólera, lo que resultó en la protección de la ciudad. Estos eventos han fortalecido la devoción popular a la Divina Pastora en Venezuela.
La Procesión de la Divina Pastora:
La procesión de la Divina Pastora es una de las más concurridas y significativas de Venezuela. Cada 14 de enero, la imagen sale en procesión desde Santa Rosa hasta la Catedral Metropolitana de Barquisimeto. Esta procesión es un acto multitudinario lleno de fe, alegría y colorido. La Divina Pastora es venerada con sombreros y trajes lujosos, lo que ha contribuido a su reputación como una de las advocaciones más queridas en Venezuela.
Mensaje destacado:
Amor Maternal: La imagen de la Divina Pastora resalta el amor maternal de la Virgen María por toda la humanidad. Este amor es reflejo del amor que Dios tiene por sus hijos y su deseo de cuidar y guiar a cada persona.
Guía hacia Jesús: La figura de la pastora simboliza la guía de la Virgen María hacia su Hijo Jesús. Así como una pastora cuida y guía a su rebaño, María cuida y guía a los creyentes hacia una relación más profunda con Cristo.
Guía hacia Jesús: La figura de la pastora simboliza la guía de la Virgen María hacia su Hijo Jesús. Así como una pastora cuida y guía a su rebaño, María cuida y guía a los creyentes hacia una relación más profunda con Cristo.
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